Los jardines son de esas áreas que todos quieren tener, ya sea al frente de tu casa, en la parte posterior, en tu terraza o en el espacio que más te apetezca. Sin embargo, no todos tienen el tiempo y la dedicación para mantenerlo al día.
Un césped natural requiere de mantenimiento, agua, limpieza y la aplicación de productos químicos para evitar la proliferación de plagas, podado, entre otras tareas, lo que conlleva tiempo y dinero. Pero por suerte existen alternativas accesibles que brindan la apariencia de un césped con el mínimo esfuerzo.
Es aquí donde entra en el mercado el césped artificial, una alfombra similar al césped natural, tanto que es confundido con este a menudo. Tienen diversas ventajas, además de servir de decoración y aquí te las explicaremos.
Qué es el césped artificial
Es un compuesto de fibras sintéticas muy similar al césped natural. Por lo general se vende en presentaciones por rollo medidas en metros cuadrados. Este se coloca en lugares deportivos, jardines u otras áreas para dar un ambiente natural.
Existen diversos tipos de césped artificial, estos varían en el tono de color, el tamaño de la fibra, material y calidad del mismo.
Su uso inició en los deportes, principalmente en los campos de fútbol y béisbol, pero con el tiempo se fue extendiendo a otros lugares como centros recreativos, jardines infantiles, parques, centros educativos, en el hogar y en otros sitios que desean brindar esta apariencia.
Puedes encontrar más datos al respecto en InterCésped, es una web que brinda información muy completa sobre este tipo de material, su instalación, usos y por supuesto, donde puedes elegir entre varios tipos y modelos para adquirir el que más te convenga.
Ventajas de usar el césped artificial
- El césped artificial a diferencia de su contraparte, no requiere de mantenimiento constante. Basta con hacer un barrido para limpiarlo de los escombros, suciedad y hojas que puedan caer sobre este.
- Es lavable, por lo que puedes aplicar agua para su limpieza, retirar los excesos y refrescar el área.
- Es de muy larga duración, dependiendo de la calidad del mismo, puede llegar a durar años manteniendo su color, textura y uniformidad.
- Su instalación es relativamente fácil, aunque para grandes zonas es recomendable contratar a un profesional para mejores acabados.
- Puede ser utilizado en diferentes superficies, cerca de piscinas, para campos de juegos, incluso para uso interior.
- No atrae insectos, esto siempre y cuando se haya instalado de forma correcta, aplicando los materiales necesarios.
- Ahorras dinero en agua al no requerir su uso continuo para mantenerse cuidado como es el caso del césped natural.
- Su color permanece durante todo el año, soportando altas y bajas temperaturas, por lo que no debes preocuparte por los cambios de temporada.
- No generan malos olores producto de la descomposición vegetal.
Tipos de césped artificiales
Hay diversos tipos de césped artificial, estos varían según el tamaño, calidad y color, sin embargo, la clasificación más empleada es según su utilidad.
- Puedes encontrar césped artificial para jardín, el cual cuenta con fibras entre 40 a 60 mm. También es empleado en terrazas y patios.
- Césped artificial para piscinas, el tamaño es similar al anterior con la salvedad que cuenta con componentes en su elaboración que lo hacen resistente al cloro de la piscina.
- Para uso decorativo se emplea un césped artificial con filamentos entre 25 a 40 mm.
- Hay tipos de césped específicos para guarderías y colegios, estos están elaborados con materiales más resistentes y flexibles, ya que al verse en constante contacto de pisadas, deben resistir más tiempo.
- Césped artificial para campos deportivos, estos miden 25 mm en promedio, teniendo también tamaños entre 15 a 20 mm. Son de gran calidad, soportan el constante tránsito de personas sobre este, incluso de algunos vehículos para mantenimiento.
- Césped artificial para usos decorativos exclusivos, es un césped artificial de entre 9 a 25 mm. Sus filamentos son pequeños y resistentes, dan una apariencia más elegante.