Para tener una oficina bien acondicionada y que todos los empleados se sientan cómodos y productivos en sus tareas, un punto muy importante es la decoración y la equipación de este ambiente. Independientemente del tipo de funciones que se cumplan, los muebles juegan un papel fundamental porque son los encargados de brindar funcionalidad y confort.
Por supuesto, al hablar de muebles se incluyen escritorios, mesas, estantes y mucho más, pero en esta oportunidad queremos hacer énfasis en la importancia de las sillas de oficina porque es donde apoyamos por completo todo nuestro cuerpo. Esta, más que ningún otro mobiliario en la oficina, debe ser de alta calidad, fabricada con materiales suaves y resistentes y además, ergonómica.
Los expertos en materia de salud hablan mucho de la importancia de mantener una postura adecuada al caminar, sentarse y dormir. Precisamente, el tiempo que mayormente pasamos sentados es durante el trabajo, así que una silla de oficina que sea cómoda y promueva una correcta postura es crucial.
De lo contrario, seremos más propensos a sufrir de dolores de espalda, lumbar, cervicales, hombros y más. Todo esto, sin duda alguna, repercutirá en los niveles de productividad de los trabajadores y por ende, pueden verse afectados los ingresos y éxito general de la empresa.
Dicho esto, comprar sillas de oficina debe ser algo muy importante para cualquier tipo de empresa y kalamazoo se posiciona como una de las mejores opciones para comprarlas de forma online. Tienen variedad, todo lo que ofrecen es de máxima calidad, cuentan con una excelente política de atención al cliente y, otro punto a favor, es que están al día con las nuevas tecnologías, por lo que también brindan la mayor comodidad y seguridad a la hora de que sus clientes adquieran sus productos a través de internet.
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Cómo elegir la silla de oficina adecuada para mis empleados
Estamos claros en que uno de los factores que tomamos en cuenta a la hora de comprar muebles para oficinas es el diseño y los colores. Pero lo más considerable es que, en el caso de las sillas, sean lo suficientemente cómodas y resistentes para que las personas (los empleados) puedan pasar varias horas sentados sin sufrir molestias.
Un dueño de empresa no puede ver esto como un gasto más, sino como una parte muy importante dentro de la inversión que debe hacer. Porque tal como lo hemos mencionado, esto es relevante para elevar la productividad, que los trabajadores se sientan bien, que haya un ambiente ameno en la oficina y que se reduzcan riesgos de bajas por dolencias o enfermedades que tengan que ver con dolores musculares o articulares que, hoy en día, son muy comunes.
En tal sentido, las sillas de oficina deben tener las siguientes propiedades o características:
- Ergonomía: posiblemente este sea el punto más importante. Hay que elegir sillas, cuyo diseño esté pensando en emular la postura natural del cuerpo. Espaldares con una curvatura adecuada para reposar bien las lumbares y con un asiento suave que abrace cómodamente la zona de las caderas, glúteos y muslos.
- Lo mejor es elegir sillas, cuya altura pueda ser manipulada. Esto permitirá que cada trabajador la adapte a su conveniencia y se cumplan con los estándares que los expertos indican, son las mejores formas de trabajar frente a un ordenador u escritorio.
- Las sillas con apoyabrazos suelen ser más cómodas. Ideales para personas que pasan varias horas del día sentadas frente a una pantalla de ordenador. Los apoyabrazos les permiten acceder a momentos de descanso para relajar hombros y cuello. Estos también deben ser movibles y ajustables.
Accesorios y complementos
No estará de más adquirir algunos complementos que ayuden a que las posturas corporales sean las mejores, como por ejemplo, cojines lumbares o para la zona del cuello o la nuca.
Los reposapiés son también un accesorio conveniente cuando la altura de la silla no logra ajustarse de la forma correcta para una persona. Quienes tienen poca estatura agradecen este detalle porque pueden mantener los pies bien puestos sobre el suelo, lo que les permite adquirir una buena posición de la cadera y la espalda y no sufrir de dolores en las piernas por mala circulación.
