Sin duda, uno de los retos más grandes a los que se enfrentan los padres ocurre cuando intentan acostar a sus hijos. Puede parecer una tarea de lo más sencilla, pero en realidad supone una batalla cada día. Para poder transformas esta odisea en un campo de rosas de lo más tranquilo, aquí os dejamos estos 5 trucos para conseguir que tus hijos adoren su habitación y no quieran salir de ella. La ropa de cama, la decoración y la elección de colores pueden ser tus aliados perfectos.
¿Quieres saber estos trucos? ¡Veámoslos!
En primer lugar, es importante que los niños relacionen su habitación con el descanso y el sueño. Una de las pautas a seguir para conseguirlo, es separa la zona de juego de su habitación, de esa manera sabrán que el tiempo de juego ha terminado y estarán más relajados.
El siguiente paso a tener en cuenta es el color que utilizaremos para pintar su habitación. Los colores vivos están muy bien, pero excitarán y darán energía a nuestros hijos. Los colores que tendremos que elegir serán, por ejemplo, colores en tono pastel y muy claritos, como también colores neutros como el gris o el beige. ¡Con esta elección darás la paz y tranquilidad que tanto deseas! De la mano de los colores, es importante saber que una habitación bien iluminada puede ser un factor muy importante. Con la luz solar conseguiremos dar mayor serenidad a la estancia y, por si fuera poco, ¡ayudará a los más pequeños de la casa a obtener una mayor concentración!
Para ir finalizando, hablaremos de una de las partes claves y más necesarias, la ropa de cama. La ropa de cama infantil se encargará de ofrecerle el descanso ideal a nuestros hijos, y de ella depende tener un sueño reparador y despertar con energía para afrontar el día. De entre la ropa de cama podemos elegir varias piezas clave.
Para los más pequeños, los sacos nórdicos son lo más indicado. Con ellos podrán dormir seguros y cómodos ya que, gracias a su cierre con cremallera, no tendrán la posibilidad de quedar descubiertos mientras duermen. Otras opciones para niños más mayores, son los edredones o las fundas nórdicas infantiles. Entre los edredones, podemos encontrar varias categorías, como puede ser el edredón ajustable, que se ajusta a la perfección al colchón utilizado, y el edredón confornt. Por otra parte, una elección muy acertada, serían las fundas nórdicas. Estas tienen la ventaja de que, al poder extraer el relleno, también pueden servir de sábana en verano. ¡Con la ropa de cama ideal, les asegurareis el mejor descanso!
Por último, y por eso no menos importante, la decoración. Una decoración acertada, le dará el remate final para una habitación de ensueño. Como bien habéis leído más arribar, es importante separar la zona de juego de la zona de descanso. Una vez tenemos eso en cuenta, lo ideal será introducir pocas cosas en el dormitorio, siguiendo la línea de colores claros o neutros. Unos complementos perfectos podrían ser, libros, peluches o cosas hechas a mano, como unas guirnaldas con motivos relajantes.
Estos son los 5 consejos para que los más pequeños disfruten de su habitación y se sientan tranquilos y relajados. Ahora es tu turno, ¿a que esperas para que duerman sin problemas? Y más aún ¡a que vayan a la cama sin problemas!
